Como su nombre maya lo dice, este lugar destaca por lo cristalino y el azul turquesa de sus aguas, pero también por ser el área mayor protegida del Caribe mexicano y cómo no, si alberga nueve ecosistemas, donde habitan 100 especies de animales, 300 aves y 1,000 plantas.

Biodiversidad y conservación

Sian Ka’an significa “donde nace el cielo” en maya. Este complejo abarca 652 mil 148 hectáreas, situadas entre los municipios de Felipe Carrillo Puerto, Tulum, Bacalar y Othon P. Blanco, en Quintana Roo, y posee 120 kilómetros del Sistema Arrecifal Mesoamericano, que incluye cuatro países: Honduras, Guatemala, Belice y México.

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Entre los nueve ecosistemas que tiene Sian Ka’an destacan la selva, humedales, arrecifes de corales y manglares, en los que se han encontrado importantes reservas de carbono.

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La palabra Chetumal proviene del maya Chaktemal, que significa “lugar donde abunda el árbol rojo”; la región fue catalogada como la cuna del mestizaje

Esta biósfera tiene un sistema de ríos subterráneos de agua dulce, único en la Península de Yucatán y el mundo, que conectan los cenotes y los petenes, unos árboles que miden cerca de treinta metros de altura y crecen entre las hierbas de los pantanos.

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También es hogar de especies en peligro de extinción como el jaguar, el tapir, el manatí y el pecarí, así como del cocodrilo mexicano y la garza chocolatera, y sirve como hábitat de aves residentes y migratorias: jabirú, la cigüeña más grande de América, entre otras

Por todo esto, esta área fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1987 y es un oasis que, si visitas Quintana Roo, estás obligado a visitar.

¿Qué hacer en Sian Ka’an?

Este hermoso complejo natural se divide en tres zonas para su conservación: la zona núcleo, que está estrictamente protegida, solo se otorgan permisos especiales para investigadores, la zona de amortiguamiento, ubicada alrededor del núcleo y abierta a turistas y, por último, la zona de transición, que se refiere a las áreas de paso y con mayor intervención humana.

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Se estima que en Sian Ka’an viven 2,000 habitantes, concentrados mayormente en los pueblos pesqueros de Punta Allen y Punta Herrero. En Punta Allen, hay cooperativas de comunidades indígenas que le dan un recorrido a los turistas para que conozcan su biodiversidad y riqueza cultural maya. También ofrecen tours en lanchas, la mayoría sin techo, para que te embadurnes bien de protector solar, ecológico, eso sí, y lleves sombrero.

Asimismo, en Punta Allen está El Blanquizal, una piscina natural, ubicada en medio del mar, rodeada de arrecifes y arena blanca.

¿Qué más?

Si quieres vivir una experiencia completa, recorre los pueblos de Señor, Chunhuhub y Tihosuco. En el primero conocerás la historia del lugar en voz de los mayores que habitan ahí, cómo se extrae la fibra del henequén, y aprenderás de medicina alternativa.

En Tihosuco hay más de 200 monumentos y edificios coloniales, entre los que destaca el Museo de la Guerra de Castas, y, para los más extremos, está la cueva de serpientes colgantes de Kantemó, mientras que en Chunhuhub podrás recorrer senderos de orquídeas, disfrutar de ceremonias mayas y visitar el centro ecoturístico Kíichpam K’áax. Estas tres localidades se encuentran a 30 minutos, entre 65 y 78 kilómetros, aproximadamente, de Felipe Puerto Carrillo.

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Para los interesados en el turismo cultural, Sian Ka’an cuenta con 23 yacimientos arqueológicos, algunos datan del siglo V d. C.  y el más grande y popular es Muyil, que formaba parte de la ruta comercial maya. Tiene un mirador y una bella laguna, dignos de una selfie.

Do’s y dont’s (recomendaciones pues)

Aquí te dejamos los mejores consejos porque te queremos ver triunfar en tu aventura caribeña:

No te adentres sólo en la jungla; podrías perderte porque la extensión de terreno es muy amplia.

Algunas playas te permiten acampar y algunos tours incluyen nado en la laguna o en los canales de Muyil; así que empaca traje de baño, toalla y muda de ropa, y ten cuidado con las indicaciones y letreros que alerten sobre la presencia de cocodrilos en la zona.

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¿Qué llevar? Ropa ligera, de preferencia de manga larga, bloqueador y repelente de mosquitos ecológicos, bocadillos, pues es difícil conseguir comida en los alrededores, agua y unos prismáticos, para evitar acercarse a los animales salvajes.

Hay excursiones en vehículos 4X4, organizadas por empresas locales, hablando de llegar en auto propio o rentado, recuerda llenar el tanque porque no hay gasolineras en la zona y también ten en cuenta que las carreteras no están en el mejor estado, puedes tardarte de Tulum a Punta Allen entre dos y cinco horas.

Pero no todas son malas noticias, prueba la langosta local que los pescadores capturan en las aguas de la reserva, en temporada de julio a febrero, y evita comer especies en peligro de extinción como el cangrejo azul o el caracol rosado.

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Haz las fotos que quieras, pero no te lleves ningún recuerdo a casa como animales o plantas, pues podrías alterar el ecosistema.

Hay muchos alojamientos por el camino, sobre todo en la zona de Punta Allen, donde encontrarás hoteles desde 800 pesos.

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