Debido a la alta aglomeración de personas el pasado fin de semana, hubo cierre de hoteles en Tulum tras la clausura de varias fiestas clandestinas. Alfonso Bastos, encargado de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), señaló que se llevaron a cabo más de 35 inspecciones.
También mencionó que la gran mayoría de los hoteles excedió el límite permitido del 60%, este porcentaje lo dictan las autoridades, basadas en el semáforo epidemiológico estatal. El cual se encuentra actualmente en color amarillo.
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Alfonso Bastos señaló que se está muy al pendiente de los diferentes establecimientos, con el fin de asegurar que éstos cumplan con todas las normas establecidas para evitar los contagios de COVID-19.
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Podría haber más cierre de hoteles
Asimismo, se pudo ver en las redes sociales varios usuarios compartieron cómo se divertían en fiestas y demás eventos ilegales realizados en lo profundo de la selva de Tulum. De continuar la tendencia, podrían registrarse otro cierre de hoteles en Tulum.
Para nadie es un secreto que Tulum es uno de los destinos del estado de Quintana Roo en los que más casos de aglomeraciones se ha registrado. Además, se ha podido ver el incumplimiento de las medidas sanitarias necesarias para combatir los contagios por coronavirus.
Uno de los mayores críticos del “turismo de borrachera” en Tulum, el actor y empresario Roberto Palazuelos, consideró que este destino está bastante descuidado al respecto.
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Turismo responsable: principal reto pospandemia
La recuperación económica de México se verá afectada debido a la gran cantidad de visitantes que llenaron las diferentes playas del país durante Semana Santa.
Debido a estas aglomeraciones, es muy probable que haya una tercera ola de contagios masivos de COVID-19. Por lo tanto, el avance que ya se tenía caería fuertemente.
El presidente del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales del Estado de México, Gilberto Javier Suaza Martínez, manifestó su preocupación por esta desobediencia social, por la no práctica del turismo responsable durante esta temporada del año.
Asimismo, señaló que espera que dentro de unas cuantas semanas no se esté “pagando” esta desobediencia sanitaria, “por el bien de todos”.
En esta ocasión, no fueron responsables los sectores empresariales y el gobierno. Si no más bien de la sociedad, que aún no ha entendido que también deben poner de su parte para mitigar las cifras de contagios.
Lo único rescatable de este periodo vacacional es que a pesar de que por segundo año consecutivo se canceló todo tipo de eventos religiosos. Muchos ciudadanos trataron de consumir y reactivar su economía durante esta época. Al mismo tiempo, se notó que hubo iniciativa por una parte de la sociedad para realizar el turismo de manera responsable.
Además, la derrama económica ha cumplido con el 65% de lo que se tenía esperado, claro está, mucho menor a años anteriores, por obvias razones. Por lo tanto, se espera que al finalizar este periodo vacacional se cumpla con la meta estipulada.
