En los últimos días, varios gobiernos de Europa, principalmente el de España, entraron en conflicto por el llamado “turismo de borrachera”.
Se trata del turismo que realiza un público juvenil proveniente de países como Francia, Alemania y otros, que visitan España para integrarse disfrutar de la vida nocturna de este país.
Asimismo, recorren sus playas y realizan actividades de entretenimiento sin seguir las medidas de sanidad que se debe observar ante la pandemia de COVID-19.
Foto: Instagram / turismodelmundoblog
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Mónica García, candidata de Más Madrid a la comunidad de la capital española, habló durante una entrevista sobre el ya mencionado “turismo de borrachera”.
Mencionó que jóvenes extranjeros visitan el país y sus playas, aprovechando que diferentes establecimientos, como hoteles, bares y, sobre todo, centros nocturnos, ya se encuentran abiertos.
Con respecto a lo anterior, Mónica García dijo: “Parece que en España se pusieron luces de neón para que todo Europa sepa que ¡Aquí somos COVID-19 free! Libres para traer el turismo de borrachera… para que se expanda el virus. Nos piden responsabilidad y no podemos ir a ver a familiares, mientras que al lado forman fiestas ilegales”.
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La respuesta de Francia, con respecto al “turismo de borrachera”
En torno a todo este tema, Francia hizo una invitación a sus jóvenes por medio de su embajada en Madrid. El Gobierno galo les pidió evitar los viajes de ocio para evitar un incremento de contagios de COVID-19.
Esta situación ha sido bastante preocupante debido a que varios países de Europa están atravesando, actualmente, por una tercera e incluso cuarta ola del virus.
Por esta razón, el pasado 18 de marzo, el Gobierno de Francia ordenó nuevamente el confinamiento casi total en París.
El encargado de Negocios de la Embajada de Francia en España, Gautier Lekens, mencionó durante un videomensaje en Twitter que no quería verse involucrado en polémicas.
“Sólo el 10% de los clientes de los hoteles son franceses. Sin embargo, les recomendamos a nuestros compatriotas no venir a hacer ‘turismo de borrachera’. A pesar de que no se los podemos prohibir, deben cumplir con las normas de un país con el que trabajamos para disminuir contagios y muertes por COVID-19”, concluyó el funcionario francés.
