Los chilaquiles son un platillo tradicional mexicano con raíces que se remontan a la época prehispánica. Su nombre deriva del náhuatl “chīlāquilitl,” que significa “tiras de chile en salsa”. En su origen, se concebían como una forma ingeniosa de aprovechar las tortillas sobrantes, convirtiéndolas en una comida sencilla pero altamente nutritiva. Las tortillas eran cocidas directamente en salsas hechas con diferentes tipos de chile, acompañadas de elementos básicos como frijoles, queso o crema. chilaquiles en CDMX
Con la llegada de los españoles, este platillo evolucionó al incorporar ingredientes europeos como el queso y la carne. Esta fusión de culturas dio como resultado la versión enriquecida de los chilaquiles que se disfruta en la actualidad. Las preparaciones tradicionales incluyen salsa roja o verde, dependiendo del tipo de chile empleado, y pueden acompañarse con pollo desmenuzado, huevo, crema, queso fresco y, en algunas regiones, con cecina o chorizo. Su versatilidad y capacidad de adaptarse a distintos ingredientes y tradiciones locales han consolidado su popularidad en todo México.
Imagen de dannyperezpalacios en Pixabay
Existen datos curiosos que resaltan la historia de los chilaquiles. En el pasado, eran considerados ideales para el desayuno debido a sus propiedades energéticas y la facilidad de preparación. En algunas recetas antiguas, las tortillas no se freían, sino que se remojaban directamente en la salsa. Sorprendentemente, este platillo apareció por primera vez en un libro de cocina estadounidense en 1898, gracias a “The Spanish Cook” de Encarnación Pinedo. Además, varias regiones de México han desarrollado versiones únicas, como los chilaquiles con mole poblano o con salsa de semillas de girasol, que reflejan la riqueza y diversidad de la gastronomía mexicana.
¿Dónde comer los mejores chilaquiles en CDMX?
Estos son algunos restaurantes para disfrutar de esta delicia culinaria:
- El Chilaquilito
- La oficina del libro
- El Bajío
- La Esquina del Chilaquil
- El Cardenal
- Los Panchos
- El Péndulo
El Chilaquilito
Es un restaurante modesto ubicado en la colonia Narvarte. Su característica principal es la posibilidad de elegir el nivel de picor de la salsa para los chilaquiles, con una escala que va del cero al diez, siendo este último un verdadero desafío. Ofrecen opciones de salsa verde, roja y campechana. Además, cuentan con servicio a domicilio, ya sea con los chilaquiles preparados o con los ingredientes por separado para mantener su textura crujiente.
Foto: Fb / Chilaquilito
Antonia. La oficina del libro
Cada porción de chilaquiles se elabora con queso fresco, crema artesanal, cebolla, aguacate y un toque de cilantro. Las opciones de salsa incluyen roja, verde, mole almendrado o la receta especial de Antonia. También existe una variante única en la que, en lugar de salsa, se utilizan frijoles guisados con hoja de aguacate y epazote. Para acompañar, ofrecen proteínas como huevo, cecina, bistec, chorizo y una combinación campechana.
Foto: FB / Antonia. La oficina del libro
El Bajío
En este lugar se honra la tradición culinaria de las mayoras, mujeres formadas en las cocinas tradicionales y reconocidas por su incomparable sazón en la preparación de platillos mexicanos. Entre las opciones destacadas están los Huevos Bajío, cubiertos con una deliciosa salsa de acuyo y chile poblano, así como las gorditas infladas de piloncillo y anís. Para complementar, ofrecen bebidas calientes como atole y chocolate, perfectas para disfrutar con estas especialidades.
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Más lugares
La Esquina del Chilaquil
En Alfonso Reyes 139 se encuentra la Esquina del Chilaquil, un popular puesto que ofrece tortas de chilaquiles, ya sean verdes o rojos. Su especialidad es “La Bomba”, una creación que combina frijoles, chilaquiles, cochinita pibil y sus acompañamientos dentro de dos panes, haciendo honor a su nombre por su contundencia. Aunque la fila suele ser larga, el servicio es ágil y vale la pena esperar.
Foto: FB / La Esquina del Chilaquil
El Cardenal
Este emblemático lugar, ideal para desayunar en la Ciudad de México, cuenta con sucursales históricas en el Centro y al sur de la capital. Desde 1969, sus cocinas han ofrecido platillos tradicionales de la gastronomía mexicana. Los chilaquiles, disponibles en salsa roja o verde, destacan por su sabor auténtico, y la sugerencia es acompañarlos con una taza de chocolate espumoso y una concha rellena de nata de leche bronca. Una característica especial es que elaboran sus propias tortillas, así como el queso y el pan que utilizan.
Foto: IG / restaurante.elcardenal
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Para cerrar con broche de oro
Los Panchos
Con más de 78 años de tradición, esta icónica propuesta gastronómica se ha reinventado con sus chilaquiles de carnitas. Servidos con salsa verde o roja y acompañados de carne surtida o maciza, los chilaquiles de Los Panchos se han consolidado como uno de los preferidos en la Ciudad de México.
Foto: IG / lospanchosrest
El Péndulo
Una de las librerías más encantadoras de la capital, donde se puede disfrutar de una comida deliciosa. Las paredes están cubiertas por estantes llenos de libros que rodean las mesas, en las cuales se sirven platillos durante todo el día. Por las mañanas, los chilaquiles con arrachera, acompañados de salsa roja, verde o de mole, son la recomendación. También en el menú se encuentran los chilaquiles crujientes, que se pueden disfrutar con queso gratinado, pollo o huevo.
Foto: FB / Cafebrería El Péndulo
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