Por Dante Rojas Pedrizco
Las sombras susurran un nombre, y es mejor estar atentos. En el tercer piso de Encuentro Oceanía, al norte de la Ciudad de México, el “Horror Torture Show” by Ping Poing promete una experiencia con cinco niveles de terror absoluto. En este lugar, las peores pesadillas cobran vida en un laberinto de oscuridad y miedo.
Pasillos estrechos y poco iluminados conducen hacia lo desconocido. Las paredes parecen respirar, mientras que el aire está impregnado de gritos que congelan la sangre. Figuras siniestras emergen de la nada, acechando a los visitantes. Cada rincón oculta un secreto macabro, y cada sombra podría significar la perdición.
¿Se atreverán a enfrentar el nivel 5? Solo los más valientes, o quizás los más insensatos (una advertencia se hace con una sonrisa siniestra), se atreven a llegar hasta el final. Los dos primeros niveles ofrecen una falsa sensación de seguridad, como un museo tenebroso donde los horrores parecen estar contenidos. Sin embargo, a medida que se avanza, el terror se vuelve palpable. Los gritos se intensifican, las apariciones se tornan más agresivas y la línea entre la realidad y la pesadilla se desdibuja.
Cada nivel tiene un costo de $100 por persona, y los boletos están disponibles en todos los establecimientos de la plaza comercial. Cada visitante decide hasta dónde desea llegar, pero es importante considerar que, una vez dentro, escapar no será tan sencillo. La entrada es para mayores de 4 años, y los menores deben ingresar acompañados de un adulto. La advertencia es clara: entrar es bajo propio riesgo.
Más de Horror Torture Show
No se debe tocar a nadie… para evitar que nadie los toque. Esa es la regla primordial. Aquí, el contacto podría desencadenar consecuencias inimaginables. No se debe separar del grupo; las almas perdidas en este lugar nunca encuentran la salida. Las sombras son traicioneras y pueden guiar a caminos de los que resulta imposible regresar.
Cada sección del recorrido está diseñada para desorientar, de modo que nunca se sepa de dónde vendrá el próximo susto. Elementos en constante movimiento, junto a una inteligencia artificial avanzada en sonido, iluminación y efectos de video, crean una atmósfera tan realista que los sentidos se convierten en los peores enemigos. El crujido de una puerta, un susurro al oído, una figura que se desvanece en la oscuridad… todo conspira para sumergir a los visitantes en un estado de pánico absoluto.
Instrumentos de tortura medievales y de la Inquisición rodean el espacio… herramientas de tormento que cuentan historias de dolor y sufrimiento. ¿Se escuchan los gritos? Aquí, la historia cobra vida de la forma más aterradora. Los ecos de las víctimas del pasado parecen resonar en cada habitación, recordando que el mal ha existido siempre.
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Las puertas están abiertas, y el horror aguarda en Encuentro Oceanía. ¿Responderán al llamado de las sombras? Acérquense si se atreven. Pero recuerden, una vez dentro, el verdadero desafío será encontrar la salida.
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