La gastronomía de nuestro país es muy rica y reconocida internacionalmente, pero tal como en el amor, en gustos se rompen géneros, y existen comidas mexicanas raras que persisten a través de los años.

Comer es uno de los placeres ante el cual pocos pueden negarse. Ya sea desde la oficina o en las calles, si nos llega el olor de un apetitoso platillo, no alcanzamos a resistirnos en diversas ocasiones.

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Satisfacer a nuestro estómago y al paladar nunca fue algo simple. La combinación de sensaciones y sabores es algo que se queda en la memoria y son estos recuerdos los que nos hacen querer volver a sentirlos. Los sabores y las mezclas, ya sean ácidas, picosas, amargas, jugosas o agridulces,  son las que nos conquistan o trauman de por vida.

¿Estarías dispuesto a comerte huevos de hormiga, considerados el caviar mexicano? Si tienes un paladar exigente y, sobretodo, valiente, no te pierdas el siguiente listado.

Estas son las 5 comidas mexicanas más raras

México, lindo y querido, no solo es uno de los países con los platillos más ricos de todo el mundo, sino también ofrece algunas de las comidas más raras. A continuación, te vamos a decir cuáles son:

• Chapulines
• Gusanos de maguey
• Huitlacoche
• Escamoles
• Moronga

Chapulines

¿Quieres botanear? Estos insectos son un platillo tradicional en muchas regiones de México, principalmente en Oaxaca. La forma de preparación consiste en tostarlos en un comal con ajo, limón y sal. Algunas veces también se le agrega chile y se comen solos o en tacos y tlayudas.

Foto: Instagram / @mioaxaquiita

Gusanos de maguey

Este alimento es utilizado tanto en la comida mexicana, como en las bebidas (mezcal), así que, se podría decir, que es muy común en nuestro país. Hay dos tipos de gusanos de maguey: el blanco, que es la larva de mariposa, y el rojo.

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Huitlacoche

Básicamente este platillo es una fruta que se echó a perder. Se da cuando al elote le sale un hongo por la humedad y, como buenos mexicanos, aprovechamos esto para cocinarlo, preparándolo en quesadillas o tacos.

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Escamoles

Los huevos de hormiga o escamoles son una comida mexicana muy nutritiva, pues contienen mucha proteína. Además, su consumo se remonta a tiempos prehispánicos, ya que era el alimento de los habitantes de Mesoamérica. Actualmente se pueden servir en sopa o emplatados con mantequilla, cebolla y ajo.

Foto: Instagram / @huey_tlacuali

Moronga

Si eres de los que se voltea cuando le sacan sangre del brazo para los análisis o cierra los ojos cuando ve este fluido, no te recomendamos este platillo. La moronga, morcilla, sangrecita o prieta es uno de los alimentos más antiguos de México, aunque en Perú, El Salvador, Guatemala, Chile y Nicaragua también se prepara.

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Es un embutido de cerdo, hecho con tripas y sangre. Contiene nutrientes como potasio, calcio, magnesio, hierro y zinc. La puedes encontrar preparada comúnmente en tacos o servida en trozos con cebolla, cilantro y chile.

Otros alimentos poco comunes

El tuétano es la médula de los huesos de un animal. Se puede preparar al horno y a la hora de servir va el hueso abierto en un plato. También se puede comer en un taco.

Instagram / @explorandoando

Los jumiles son insectos voladores de menos de un centímetro, por lo que su captura se vuelve toda una hazaña. Los encuentras en estados como Guerrero y Morelos y se comen crudos o en salsa de jitomate.

No cabe duda de que todos tenemos gustos diferentes y, aunque algunos platillos pueden sonar muy extravagantes, han perdurado hasta ahora, lo que indica su aceptación y un sabor que le agrada a la mayoría.

Descubre más en el siguiente video:

¿Conoces otras comidas mexicanas raras que sean tu gusto culposo?