Cerrar el modal de compartir

Compartir

Url copiada !
Ícono de carga

Los jóvenes queremos paz

La juventud es un “divino tesoro” que no debería estar siendo utilizado para enfrentar guerras de viejas rencillas 

Person

Por: Ian Poot Publicado: 10/11/2023


Los jóvenes queremos paz

Foto: TW / @mvazquez71

Dicen por ahí que  “La guerra es un lugar donde jóvenes que no se conocen y no se odian,  se matan entre sí, por la decisión de viejos que se conocen y se odian, pero no se matan”. La guerra de los viejos nos afecta a los jóvenes, cuando vemos gran parte de los problemas sociales que tenemos es porque los boomers aprisionan el poder sin querer dejarlo ir.

¿Qué tendría que estar haciendo un viejo Biden de 80 años, un Putin de 71 o un López de 69 aferrándose al poder, junto con su gabinete en plena senectud? Ellos me recuerdan a otro viejo de cabello naranja que no entiende el nuevo mundo, y que sigue aferrado al poder, dividiendo, sembrando odio racial, sin entender que somos efímeros. Que no entienden que están comprometiendo el destino de los más jóvenes, que están mandando a la guerra a jóvenes que queremos disfrutar de este mundo y no destruirlo con misiles, los jóvenes que queremos viajar y conocer lugares en lugar de masacrarnos por ideas políticas y religiosas. Quizás estos viejos deberían estar disfrutando de sus nietos o de los años que les quedan.

En los últimos años hemos notado que los grandes cambios lo han dado los más jóvenes como Bukele, Malala, Thunberg o Musk. Y no me malentiendan, ser joven es un estado mental, hay algunos como Slim que a sus 83, sigue aportando mucho al mundo, o señores como Miguel Quintana Pali de Xcaret que no dejan de innovar y de dar grandes productos turísticos al mundo. Me acuerdo de mi amigo Armando Bojórquez, Director de Viajes Bojórquez, con una vitalidad de quinceañero que hace más que muchos por el turismo. Bien lo decía Arthur Wing Pinero: “Los que aman profundamente nunca envejecen, pueden morir de vejez pero mueren jóvenes”.

Somos los jóvenes la generación sin jubilación, con escaso acceso a la vivienda, los de la era de freelancers, los que no tenemos prestaciones y aun así tratamos de vivir en paz, la generación que gasta en viajes y no en lujos, la generación de la inclusión al amor LGBTQ+, lo que hemos roto con los estereotipos viejos, y aun así los viejos con todos sus privilegios, con casas y propiedades que compraron cuando era asequible, los que siguen ostentando los puestos directivos, no cediendo el poder a las nuevas generaciones y acumulando cosas que no se llevarán al limbo, siguen siendo mucho de ellos los que quieren guerra.

Hoy vivimos en Guerra, una declarada por un viejo Vladimir que ya ha dejado miles de muertos en Ucrania, y que los que mueren son jóvenes por pedazos de tierra. Ahora, hay otra guerra en Tierra Santa entre Musulmanes y Judíos, hoy mueren palestinos e israelitas por una guerra de milenios, el líder de Hamas tiene 60 años, el de Israel 74, y los que siguen muriendo son los jóvenes, los niños y las mujeres. Término citando otra frase, de Andrew Bonar Law: “No existe la guerra inevitable. Si llega, es por fallo del hombre”.

Te recomendamos:

¡La pesadilla sigue! Conoce la segunda parte de turismo negro

¡La pesadilla sigue! Conoce la segunda parte de turismo negro

El turismo negro se basa en la curiosidad, memoria histórica, turismo de patrimonio y educativo, entre otras cosas que engloban escalofriantes experiencias

ícono de compartir
Compartir

Comentarios