En la región central de Jalisco se sitúa Villa Corona, municipio que alberga una de las atracciones turísticas más singulares: el único Templo de Arena conocido en el mundo. Esta obra arquitectónica extraordinaria fue erigida hace 85 años, casi exclusivamente con manos humanas, como proyecto familiar liderado por el señor Jesús Navarro Godoy y sus hijos.
México ostenta ser uno de los países más bellos del mundo, gracias a los sitios y destinos magníficos que se extienden por todo su territorio. Uno de estos lugares se halla en Villa Corona, un pueblo en Jalisco conocido por sus tres prominentes balnearios y por ser la morada de un atractivo especial: el Templo de la Virgen de Lourdes. Este punto, seleccionado por un visionario local, se encuentra en una colina de suave jal debajo de un cerro del municipio. Con las manos como principal herramienta, junto con palas y picos, la familia logró erigir esta estructura.
El resultado fue sorprendente. Colectivamente, crearon un sistema de cuevas que alberga el templo dedicado a la Virgen de Lourdes, así como varios salones adicionales. Al recorrer los túneles, se puede apreciar el esfuerzo de toda una familia. En su época, esta construcción causó gran sensación, tanto así que el entonces presidente de México, el General Lázaro Cárdenas, viajó a esta villa para visitar la ya famosa edificación.
Con el beneplácito del presidente, lo que inicialmente fue una empresa clandestina se transformó en un proyecto legalmente reconocido. A pesar de contar con la aprobación del gobierno federal, muchos años transcurrieron antes de que la labor iniciada por Don Jesús Navarro y sus hijos llegara a su conclusión. En total, transcurrieron 50 años para que el Templo de Arena de Villa Corona finalmente estuviera completo.
¿Qué más del Templo de Arena?
Aunque entrar en la capilla es seguro, se debe tener precaución debido a la presencia de murciélagos en los túneles, lo que podría causar sobresaltos inesperados. En la actualidad, son los descendientes de Don Jesús Navarro, especialmente sus nietos, quienes se encargan de mantener y dar vida al lugar.
Es importante destacar que, aunque la mayoría de los habitantes del pueblo están familiarizados con el Templo de Arena, su existencia es prácticamente un secreto para quienes residen fuera de la localidad. Este tesoro turístico se encuentra en la calle Manuel M. Dieguez número 257, en la colonia El Verde.
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El horario de visita para todos los visitantes es de lunes a viernes, de 16:00 a 20:00 horas, y los domingos de 10:00 a 20:00 horas. Permanece cerrado los sábados. El acceso al Templo de Arena es mediante una cooperación voluntaria.
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