Para quienes quieren cerrar el año lejos del ruido, las prisas y las multitudes, Tehuamixtle, mejor conocido como Tehua, se ha vuelto uno de esos secretos bien guardados de la costa del Pacífico mexicano. Este pequeño paraíso en Cabo Corrientes ofrece días tranquilos marcados por el sonido del mar, el sabor fresco de los ostiones y la calidez de una comunidad que mantiene viva la esencia de un pueblo pesquero.
Despedir el año en este lugar se vive de forma diferente. Es una experiencia más cercana, rodeada de naturaleza, con un ambiente sencillo y rústico que atrapa a quienes buscan descansar de verdad y cerrar el ciclo sin distracciones.
La bahía de Tehuamixtle destaca por sus aguas claras y calmadas, perfectas para nadar, hacer esnórquel o simplemente dejarse llevar mientras cae la tarde. El 31 de diciembre, el cielo se pinta de tonos dorados que se reflejan en el mar, regalando un escenario inolvidable para decir adiós al año.
Tehua también es famoso por tener algunos de los mejores ostiones de México, y en fin de año el mar se convierte en el gran protagonista. Familias y restaurantes locales preparan cenas especiales con pescados zarandeados, cocteles de camarón, ostiones frescos y tostadas de ceviche que reúnen a todos alrededor de la mesa.
Muchos visitantes prefieren una cena sencilla frente al mar, con música suave y la convivencia cercana con la gente del lugar, creando un ambiente cálido y familiar que se siente auténtico.
Más de Tehuamixtle
Aquí, la llegada del Año Nuevo se vive sin prisas ni excesos. Hay reuniones pequeñas en la playa, música tradicional, fogatas que iluminan la arena y brindis discretos que se mezclan con el sonido de las olas. Es una celebración tranquila donde el océano marca el ritmo.
Quienes buscan un momento más personal suelen caminar por la orilla del mar para agradecer lo vivido y recibir el nuevo año con calma y buenas intenciones.
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Después del 1 de enero, muchos aprovechan para quedarse y disfrutar paseos en lancha para observar fauna marina, caminatas por senderos costeros y visitas a miradores naturales. Además, Tehua es un buen punto de partida para conocer otros rincones de Cabo Corrientes, como Mayto y Villa del Mar.
Tehuamixtle conserva ese encanto de pueblo escondido que invita a volver, una y otra vez, para reconectar y dejarse llevar por su ritmo pausado.
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