El Sótano de Popocatl, ubicado en Veracruz, México, es una cueva de gran relevancia geológica y cultural. Descubierto en la década de 1960 por espeleólogos locales, este sistema de cuevas ha capturado la atención de aventureros y científicos debido a su impresionante profundidad y las formaciones minerales únicas que alberga.
Con una profundidad de aproximadamente 350 metros, el Sótano de Popocatl es uno de los más profundos en México. Su nombre proviene del náhuatl “Popoca,” que significa “humo” o “vapor,” en referencia al ambiente misterioso y la sensación de humedad que prevalece en el interior. La cueva se formó a lo largo de millones de años por la acción del agua en la roca caliza, creando intrincados pasadizos y cámaras subterráneas.
Foto: X / @elivanmacias
Además de su importancia geológica, el Sótano de Popocatl posee un valor cultural significativo para las comunidades locales. En tiempos antiguos, las cuevas eran consideradas lugares sagrados y se les atribuían propiedades místicas. A lo largo de los siglos, la cueva ha sido objeto de leyendas y relatos tradicionales que reflejan la profunda conexión de las comunidades indígenas con su entorno natural.
Hoy en día, el Sótano de Popocatl es un destino popular para espeleólogos y turistas en busca de aventuras subterráneas. Su exploración requiere habilidades avanzadas debido a sus desafiantes condiciones y la necesidad de equipos especializados. La cueva continúa siendo un testimonio impresionante de la geología de la región y un lugar de gran interés para el estudio y la exploración.
Foto: X / @Huidas
¿Qué hacer en el Sótano de Popocatl?
Descubre los atractivos más populares de este magnífico destino que te encantará por su naturaleza:
- Cascada de Popocatl
- Cueva de los Tzimpiles
- Cueva de Totomochapa
- Mirador rostro del Cristo
- Río subterráneo
- Senderismo al sótano
Cascada de Popocatl
El sumidero tiene cerca de 80 metros de profundidad, destacándose el río que cae al fondo, formando una cascada subterránea de 60 metros con un amplio cuerpo de agua interior.
La densa vegetación que cubre las paredes del sótano añade majestuosidad al lugar, ofreciendo una vista verdaderamente espectacular.
Fotos: @vagando_por_mexico
Cueva de los Tzimpiles
A 10 minutos en coche del sótano de Popocatl, se encuentra una cueva donde se hallaron jarros prehispánicos conocidos como «tzimpiles». Por esta razón, el lugar lleva ese nombre. Dentro de la cueva, se pueden observar formaciones rocosas inusuales y pinturas rupestres.
En esta localidad, los habitantes preparan antojitos típicos y comidas con productos frescos, recién sacados del rancho. Por lo tanto, también vale la pena probar algún platillo en los alrededores.
Foto: IG / fer_garces117
Cueva de Totomochapa
Esta cueva, que parece una bóveda gigante, es famosa por ser el escenario de la ceremonia ancestral en la que se agradece a la madre tierra por las cosechas y se pide permiso para volver a sembrar, al igual que en otras cuevas de la sierra.
Es una reunión singular de grupos indígenas que bailan toda la noche en agradecimiento a los elementos naturales, lo cual se considera que ayuda a mantener la riqueza del lugar cada año.
Foto: X / spacebikers_orizaba3
Más actividades
Mirador rostro del Cristo
A una hora del sótano, hay una zona de miradores desde donde se puede ver, a unos 8 kilómetros, el perfil de un rostro en la cima de la montaña, formado por tres cerros.
Los locales llaman a este perfil el «rostro de Cristo», aunque algunos prefieren llamarlo el «rostro de las 2 culturas», en referencia a la mezcla de las razas náhuatl e hispana. Dependiendo del ángulo desde el que se observe, se puede ver uno de estos dos rostros.
Río subterráneo
Llegar hasta el río es una hazaña para los más intrépidos, ya que se requiere descender por dos rapeles: el primero de 30 metros a 70 grados y el segundo, un rapel libre y vertical de 50 metros.
En la base del sótano, se recorren 500 metros hasta llegar a un sifón, donde habitan peces ciegos cavernícolas, adaptados a las condiciones de poca luz del lugar.
Foto: IG / marcos.levii.trip
Senderismo al sótano
Se realiza una caminata de 15 minutos por un sendero que lleva a la entrada del sumidero de Popoca, como también se le conoce a este sitio. Aquí, se puede admirar el imponente tamaño de la cueva y escuchar la fuerte caída del agua.
Hasta este punto, se puede llegar de forma segura sin equipo especializado, aunque es necesario llevar botas o calzado con suela rígida, ya que el camino está lleno de piedras y ramas.
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¿Cómo explorar este desino?
Para vivir la experiencia al máximo, la mejor manera de explorar este lugar es hacer un descenso en rapel con un guía experimentado. Para ello, se debe contratar el servicio en Orizaba o Córdoba, donde hay muchos operadores turísticos que ofrecen guías certificados.
Antes de llegar a la cascada, se realiza una caminata de 15 minutos por un sendero que atraviesa el bosque, permitiendo apreciar bellos parajes. Finalmente, el estruendo de la cascada anuncia la llegada a la boca del sótano.
Foto: X / @Huidas
Hasta este punto, se puede realizar el recorrido sin equipo especial. Si solo se desea admirar la entrada al sótano, es posible quedarse aquí. Sin embargo, se necesitarán botas o calzado de suela rígida, ya que el camino está lleno de piedras y ramas que podrían lastimar los pies.
Para alcanzar el fondo del sótano, se requieren dos descensos. El primero es de 30 metros a 70 grados, mientras que el segundo es de 50 metros y se realiza en rapel libre o “volado”.
Foto: @alfredomoran_photo
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¿Cómo llegar al Sótano de Popocatl?
Saliendo en auto de Orizaba, toma la autopista rumbo al puerto de Veracruz. Después de unos 20 kilómetros, pasarás por la ciudad de Córdoba y encontrarás la salida hacia Amatlán. Toma la desviación a la derecha y enseguida verás la última gasolinera antes de entrar a la sierra.
Continúa 2 kilómetros más y habrás cruzado el pueblo de Amatlán, dirigiéndote hacia Coetzala, un pequeño pueblo a la orilla de la montaña. A la salida de este pueblo, encontrarás algunos señalamientos viales que te guiarán hacia las cavernas.
Foto: X / @ElCastorViajes
Sin embargo, la forma más rápida y menos sinuosa para llegar al sótano de Popocatl es a través de Córdoba. Una vez allí, toma la desviación hacia Amatlán de los Reyes y continúa hasta el municipio de Coetzala. Desde ahí, sigue el camino que lleva a la comunidad de Totomochapa. Desde Totomochapa, toma un sendero de 1 kilómetro que te llevará hasta el sótano.
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