En el pintoresco municipio de Jocotepec, a las orillas del Lago de Chapala, se venera al Señor del Huaje, el Cristo más imponente de Jalisco, una figura cargada de historia, milagros y profunda devoción. Este destino también ofrece una variedad de atractivos turísticos que aseguran que cada visita sea una experiencia verdaderamente mágica.
Uno de los mayores atractivos de este lugar es la celebración en honor a la imponente figura del Cristo, conocido como el Señor del Huaje. Hay numerosas leyendas sobre su origen, todas coinciden en que su llegada fue interpretada como una señal divina para la comunidad local.
Según el libro “Los Dos Cristos de Jocotepec: Origen y evolución de su Culto y de sus Fiestas”, el municipio fue establecido como pueblo de indígenas el 20 de noviembre de 1529 por instrucciones directas de Hernán Cortés. Desde entonces, estuvo bajo la tutela espiritual de los frailes franciscanos del convento de Ajijic.
Inicialmente dedicada a San Francisco de Asís, la devoción en Jocotepec cambió drásticamente en la década de 1715 cuando apareció el Cristo que hoy es objeto de veneración y respeto por parte de los habitantes.
Conocido anteriormente como “El Santo Cristo de la Expiración”, el Cristo apareció en un árbol de huaje en un terreno de San Pedro Tesistán. Inicialmente, El Señor del Huaje ganó gran popularidad entre los habitantes, pero después de más de un siglo, su importancia comenzó a disminuir gradualmente. Tanto es así que los devotos empezaron a jurar fidelidad a otra escultura, conocida como El Señor del Monte.
¿Qué más del Señor del Huaje?
La escultura fue tan olvidada que llegó a ser considerada “fea y desproporcionada”. Debido a esto, fue retirada de la parroquia y trasladada a la capilla del antiguo Hospital, donde permanece hasta hoy en día.
En la década de 1930, se revitalizó la antigua festividad en honor al Señor del Huaje. El cura José Sánchez Contreras propuso que la celebración se llevara a cabo el cuarto domingo de cada enero, con vísperas, misas y sermones. Los pobladores aceptaron la propuesta y desde 1942 comenzaron a celebrar la imagen anualmente. Sin embargo, en 1992 la festividad experimentó otro cambio y pasó a realizarse el primer domingo de mayo.
En 1999, se decidió remodelar el interior de la capilla una vez más, mientras que en 2004, las autoridades eclesiásticas ordenaron restaurar nuevamente la figura del santo.
En la actualidad, el Cristo del Señor del Huaje tiene una antigüedad cercana a los 309 años. Con unas dimensiones de 3.20 metros de altura por 2.41 metros de ancho, sin incluir la cruz de madera que lo sostiene, esta imponente figura supera los 400 kilogramos de peso. Debido a su tamaño excepcional, se considera una de las esculturas más grandes tanto del estado como del país.
La historia del Señor del Huaje ha sido transmitida de generación en generación, y su influencia continúa extendiéndose por todo el estado. Esta expansión se debe en gran parte a canciones, pinturas, fotografías e incluso producciones audiovisuales que giran en torno a su figura. Un ejemplo notable es el documental titulado “El Santo Cristo de la Expiración (2017-2018)”.
Talleres de telares
Si decides visitar al Señor del Huaje, también podrás explorar los talleres de telares situados en la plaza principal, donde seguramente encontrarás piezas elaboradas por artesanos locales. No te pierdas la oportunidad de probar la típica birria en los portales cercanos. Además, puedes aventurarte a conocer Roca Azul, un club privado, deportivo y recreativo donde puedes dormir bajo las estrellas, rodeado por la belleza del paraíso que ofrece el Lago de Chapala.
Este lugar es perfecto para quienes disfrutan del camping, ya que ofrece una amplia gama de servicios para garantizar una noche increíble. Los huéspedes pueden disfrutar de una alberca gigante y otra de aguas termales, vestidores con baño de vapor, un salón de juegos y diversas canchas deportivas como fútbol, voleibol, basquetbol, tenis y pickleball. Además, hay mesas de billar, ping-pong, futbolitos y juegos de mesa para entretenerse.
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El kitesurfing es muy dinámico y libre gracias a la ligereza de la tabla y a la facilidad con que el aire impulsa a quienes lo practican
Otro punto imperdible es el Club de Observadores de Aves, una organización sin fines de lucro que se dedica a promover esta actividad a través de conferencias, pláticas, activaciones y recorridos guiados a cargo de expertos en el tema. La manera más fácil de unirse a sus recorridos y conocer todas sus actividades es visitar su sitio oficial en Facebook: https://www.facebook.com/PlumasdelLago?locale=es_LA.
Este y más atractivos te esperan en Jocotepec, un rincón turístico bañado con las aguas del Lago de Chapala y un imperdible si visitas Jalisco.
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