México registró una caída del 46% en captación de turistas extranjeros en 2020, en un análisis realizado sobre un grupo de 47 naciones. Esta afectación fue mucho menor en comparación con otros países. Sólo casos como Madagascar y Laos lograron superarlo, al registrar caídas del 43% y 17%, respectivamente.
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Grandes potencias turísticas tuvieron una mayor caída, tal es el caso de China, que tuvo un descenso del 88%.
Con base en las estadísticas, México ha sido de los países que mejor ha resistido el golpe que provocado por la pandemia de COVID-19. Uno de los factores que más influyó fue que el país decidió no cerrar sus fronteras y no impuso filtros estrictos.
En 2020, México mostró resiliencia, siendo el país menos afectado dentro de la lista de 47 países seleccionados por la Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD).
En el caso de América Latina, también hubo declives significativos: Perú -79%, Ecuador -75%, Colombia -72% y Costa Rica -6.8%.
México, país más resiliente en materia de turismo
La Organización Mundial del Turismo (OMT) informó que los expertos en turismo sólo ven posible volver a los niveles anteriores a la COVID-19 hasta el año 2023.
Incluso la mayoría de los expertos entrevistados sólo ven un regreso a los niveles del 2019 para el año 2024 o más tarde.
El informe de la UNCTAD indica que las principales barreras son las restricciones de viaje. Además, de la lenta contención del virus, un entorno económico deficiente y la falta de confianza de los viajeros.
En este 2021 se esperaba un mayor progreso para la recuperación de este sector en el mundo. Sin embargo, este ha sido el peor año para la mayoría de los destinos turísticos, registrando un descenso global del 88%.
Por otro lado, se prevé una mejora significativa en algunos destinos en las temporadas de verano y otoño del hemisferio boreal. Principalmente, para los viajes regionales y domésticos.
A pesar de que los viajes nacionales han aumentado considerablemente, esto ayuda muy poco a la economía de los países en desarrollo que dependen del turismo internacional.
Al mismo tiempo, la UNCTAD señaló que es probable que los cruceros pierdan mucha popularidad, debido a que implican un confinamiento prolongado. Esto afectaría directamente a los países en desarrollo que dependen de la llegada de los cruceros, obligándolos así a diversificar sus industrias.
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