El turismo mundial en 2025 mostró algo que en tiempos recientes se había vuelto un lujo: estabilidad. Nada de repuntes vertiginosos, nada de desplomes pandémicos, nada de picos artificiales. Solo crecimiento ordenado, cifras decentes y una demanda que se mantiene sólida incluso con inflación, conflictos, precios y servicios aéreos todavía elevados.

Para México, pese al limitado apoyo gubernamental, los actores y generadores de turismo lograron un año claramente positivo con un crecimiento cercano al 7% en relación al año anterior. Se mantuvo el volumen de visitantes extranjeros con una ligera disminución del gasto per cápita y, pese a la atonía económica, el turismo nacional volvió a ser el motor del sector, más del 70% de la ocupación provino del mercado interno.

En síntesis: México tuvo un año bueno, incluso mejor que la media global. No explosivo, pero sí robusto, estable y rentable.

A nivel mundial, cerraremos este atípico 2025 con un crecimiento cercano al 5%, superior al crecimiento del PIB, de tan solo 2%. La ONU-Turismo confirmó que el sector alcanzará más del 97% del nivel prepandemia.

Todo esto dibuja un panorama de crecimiento moderado pero firme, el tipo que le da oxígeno a cadenas hoteleras, aerolíneas y destinos, sin sobrecalentarse.

Si el turismo fuera un paciente, 2025 sería ese año en que los signos vitales regresan a rangos saludables. 2025 deja lecciones y tendencias claras:

1. El viajero quiere calidad, no solo cantidad. Experiencias, gastronomía, cultura, bienestar
2. La mezcla turística cambió: playas sólidas, ciudades coloniales en crecimiento, turismo de naturaleza al alza
3. El mercado nacional sostiene los destinos cuando el internacional modera o decae
4. Los precios altos no frenaron tanto la demanda, pero sí hicieron al turista más selectivo
5. El mundo ya no viaja por impulso, viaja con intención

2025 es el tipo de año al que cualquier secretario de turismo le diría “gracias por no darme sustos”.

El negrito en el arroz, no podía faltar, lo encontramos en las líneas aéreas. Mientras el mundo del turismo celebra crecimiento del 5%, más de un destino siente que la “recuperación” viene acompañada de tarifas aéreas que parecen vender el avión, no el asiento. ¿Ha intentado comprar un refresco al interior de un avión? ¿Le han cobrado por el transporte de la maleta como si fuera un resguardo de metal precioso?

Te recomendamos:

Tips para tomar mejores fotos en viajes

Tomar fotos en viajes es mirar con intención: explorar, madrugar, arriesgarte, incluir personas y detalles, planear sin prisas y aprovechar cada momento

Y a nivel macroeconómico la inflación turística sigue viva, restaurantes más caros, tours comprimidos, y la eterna frase del viajero: “Me costó más llegar que quedarme”.

Aun así, 2025 fue un buen año para el turismo: estable, rentable y con rumbo claro.

México destaca con cifras por encima del promedio global, un mercado interno muy fuerte y destinos que siguen expandiendo su atractivo. El mundo cerró cerca del 100% de la actividad prepandemia, dejando atrás la montaña rusa de los últimos años.

¿Falta mucho para volver a crecimientos de doble dígito? Sí. ¿Fue un año de base sólida y perspectivas positivas? También. ¿Es el tipo de año que necesita el turismo para madurar? Definitivamente. 

Feliz y turístico 2026.