Morelia, capital de Michoacán, destaca por su historia, su vida cultural y su fuerte tradición gastronómica. En su Centro Histórico de cantera rosa se esconden rincones llenos de aromas y sabores que reflejan la cocina purépecha. Entre ellos están sus mercados tradicionales, espacios donde comer va más allá del antojo y se convierte en una experiencia que alimenta el cuerpo y también el corazón.
Mercado de Antojitos San Agustín
Detrás de la imponente Catedral, al descender por el andador Hidalgo, se localiza el conocido Mercado Hidalgo, mejor identificado como Mercado de Antojitos San Agustín. Este lugar hace honor a su nombre con una amplia oferta de platillos típicos.
Con más de 40 años de historia, aquí se preparan enchiladas placeras, corundas, buñuelos, sopes, gorditas, quesadillas, tostadas, tacos, tortas, caldos y postres, entre muchas otras opciones. Este punto gastronómico se encuentra en el portal de la plaza principal del exconvento de San Agustín, una zona donde es común ver a la gente reunirse para bailar, asistir a eventos culturales o disfrutar exposiciones artísticas.
Mercado Independencia
En pleno corazón de Morelia, sobre la avenida Lázaro Cárdenas 526, se ubica el Mercado Independencia, uno de los más antiguos y visitados de la ciudad. Es reconocido por su variedad de productos, frutas y verduras a buen precio, además de su extensa oferta gastronómica.
Entre sus pasillos se pueden encontrar caldos de gallina, menudo, tacos, carnitas, barbacoa, antojitos mexicanos, comida corrida, café, licuados, aguas frescas, quesos, mole y carne de puerco con corundas, por mencionar algunos. También es un buen sitio para comprar pan recién horneado proveniente de Zinapécuaro, empanadas de miel de azúcar, roscas de manteca, ate, bizcochos de huevo y bolillos hechos en horno de leña. A esto se suman áreas llenas de flores, abarrotes, piñatas, regalos, artículos de piel, jarciería y artesanías típicas.
Mercado Revolución
El Mercado Revolución, mejor conocido como Mercado de San Juan, abrió sus puertas en junio de 1965 y recibe su apodo por su cercanía con el Templo de San Juan. Es muy popular entre los morelianos por la venta de plantas medicinales, tés, raíces y productos naturales para la curación.
En el área de comida se ofrecen carnes de distintas especies como conejo, codorniz, pato y guajolote. También son muy solicitados los tamales, corundas, uchepos dulces o salados y el atole en sabores tradicionales como chocolate, vainilla, fresa, cajeta y champurrado elaborado con maíz. Además, se venden frutas y verduras recién cortadas de la milpa, carnitas michoacanas, machetes, menudo, birria y caldo de cabeza.
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Mercado de Dulces y Artesanías “Valentín Gómez Farías”
Para quienes disfrutan de los sabores tradicionales, una visita al Mercado de Dulces y Artesanías es casi obligada. Aquí se ofrece una gran variedad de golosinas típicas como las morelianas, frutas cristalizadas, jaleas, ates, cajetas, chongos zamoranos, chocolate artesanal, rompope, obleas, cocadas, dulces de leche y palanquetas.
Además de los dulces, el mercado cuenta con una atractiva selección de artesanías, entre ellas rebozos de Ahuirán, piezas de cobre de Santa Clara, guitarras de Paracho, catrinas de Capula y artículos de Quiroga. Se localiza en la calle Valentín Gómez Farías, dentro del primer cuadro de la ciudad.
Estos mercados son solo una muestra de los muchos espacios que vale la pena recorrer en Morelia, Michoacán. Cada uno representa una pequeña parte de los aromas, sabores y tradiciones que dan identidad a esta tierra conocida como “El alma de México”.
