El estado de Jalisco destaca por su gastronomía variada y deliciosa, capaz de conquistar a quienes tienen la fortuna de probarla. Entre los platillos más emblemáticos se encuentran las tortas ahogadas, la tradicional birria, el reconfortante caldo de bote, los tamales de acelga, las lentejas rancheras y el borrego al pastor. Estos sabores únicos reflejan la riqueza culinaria de esta región mexicana. Chacales de Jalisco
Un lugar especial en esta lista lo ocupan los chacales, un manjar típico que se disfruta en diversos municipios de Jalisco. A pesar de lo que su nombre sugiere, los chacales no son más que langostinos de agua dulce, también conocidos como acamayas. Su preparación puede variar entre caldillo, con verduras, al tamarindo, a la diabla o al mojo de ajo, ofreciendo opciones para todos los gustos. Además, algunos consideran que este platillo tiene propiedades afrodisíacas, lo que añade un atractivo adicional a su fama.
Estos crustáceos, propios de la Costa de Jalisco y la Sierra de Amula, se capturan utilizando métodos tradicionales. Uno de los más comunes son las chacaleras, estructuras cónicas elaboradas con varas que se colocan entre las piedras de ríos y arroyos. Los animales entran en estas trampas, pero ya no logran salir. En algunas localidades, incluso se cultivan en presas y estanques. Los langostinos suelen tener un color anaranjado y pueden medir entre 8 y 15 centímetros o más, dependiendo de la especie.
Más sobre los chacales de Jalisco
Antes de cocinarse, los chacales se lavan cuidadosamente, levantando el caparazón de su espalda para limpiarlos a fondo. Entre las recetas más populares está la preparación al mojo de ajo, que resalta por su sencillez. Para elaborarlos, se sofríen ajos picados y rebanadas de cebolla en mantequilla; luego se añaden los langostinos y se dejan cocinar durante unos 20 minutos.
Otra opción muy apreciada es el caldillo con verduras. En esta versión, los chacales se hierven junto con ajo, cebolla y jitomates picados. Tras 20 minutos de cocción, se agregan zanahorias, chayotes, papas y chícharos, dejando que todo se cocine durante 10 minutos más. Si se busca un toque picante, el chile habanero y la cebolla son excelentes acompañantes para intensificar el sabor.
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Para disfrutar de esta delicia jalisciense, basta con visitar los mercados y restaurantes de municipios como Tomatlán, Unión de Tula, La Huerta, Casimiro Castillo, Autlán de Navarro y El Grullo, donde los chacales se preparan con esmero, haciendo honor a esta tradición culinaria única de Jalisco.
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