Durante la contingencia sanitaria, muchas playas, así como otros lugares públicos como parques y jardines, debieron cerrar el paso a los turistas debido al COVID-19, durante alrededor de tres meses, estos espacios prohibieron la entrada al público.
Tras la pandemia y para reactivar la economía, muchos espacios públicos han reabierto para recibir visitantes, sin embargo, no todos los lugares tuvieron suerte con esta reapertura.
Un ejemplo es Guasave, Sinaloa, donde el domingo anterior llenó las playas y espacios recreativos, y el mayor problema, más allá de la saturación de gente, sino la falta de cumplimiento de protocolos de prevención.
En la entrada de Las Glorias se colocó un módulo con cubrebocas a disposición de los visitantes, pero la gente pasaba de largo sin tomarlos. El Gobierno no esperaba esta respuesta por parte de la ciudadanía y que la gente se relajara de tal manera.
La mayoría de las personas que visitaron estas playas fueron jóvenes sin ningún tipo de protección, ni cubrebocas. Por estas razones se establecieron rondines de vigilancia a lo largo de las playas y ahora se está considerando el cerrarlas nuevamente.
Por otro lado, en La Paz, Baja California, se volvió a tomar medidas de restricción debido a la irresponsabilidad de algunas personas, entre ellas el cierre de las playas del municipio, para evitar nuevos contagios.
De igual manera, en el malecón solamente podrán transitar personas en bicicleta o automóvil. Además, en transporte público, tiendas departamentales y tiendas de autoservicio se reforzarán las medidas de bioseguridad.