Amecameca es un pueblo ubicado al oriente del Estado de México, a los pies de los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl, y es uno de los asentamientos con mayor riqueza histórica cerca de la Ciudad de México. Sus orígenes se remontan a la época prehispánica, cuando estuvo habitado por pueblos indígenas conocidos como los amaquemecans. Posteriormente, la región quedó bajo el dominio del Imperio mexica, lo que permitió el desarrollo agrícola y comercial de la zona.
Con la llegada de los españoles en el siglo XVI, Amecameca fue evangelizada por los frailes franciscanos, quienes construyeron importantes edificaciones religiosas, como el convento de La Asunción y, más tarde, el santuario del Señor del Sacromonte. Durante la época colonial, el pueblo se consolidó como un punto estratégico en el camino entre la Ciudad de México y las regiones del oriente del país, manteniendo una economía basada principalmente en la agricultura.
En el siglo XIX, Amecameca vivió los cambios políticos derivados de la Independencia de México y obtuvo reconocimiento oficial como pueblo dentro del Estado de México. Durante la Revolución Mexicana, la zona tuvo presencia de grupos zapatistas, lo que marcó la vida social y económica de la comunidad.
En la actualidad, Amecameca es reconocida por su patrimonio cultural, sus tradiciones religiosas y su cercanía con los volcanes, lo que la convierte en un importante destino turístico y cultural para quienes buscan conocer la historia y naturaleza de la región.
Ex Hacienda Panoaya
La Ex Hacienda Panoaya es uno de los sitios más representativos de Amecameca y un espacio lleno de historia y naturaleza. Este lugar es conocido por haber sido el hogar de Sor Juana Inés de la Cruz durante su infancia, lo que le otorga un gran valor cultural.
Actualmente funciona como parque recreativo y centro cultural, donde los visitantes pueden recorrer el museo dedicado a Sor Juana, disfrutar de áreas verdes, lagos, un laberinto natural y zonas con animales. Es un sitio ideal para familias, ya que combina historia, educación y actividades al aire libre en un entorno tranquilo.


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Santuario del Señor del Sacromonte
El Santuario del Señor del Sacromonte se encuentra en lo alto de un cerro y es uno de los principales símbolos religiosos de Amecameca. Fue construido sobre un antiguo centro ceremonial prehispánico, lo que refleja la mezcla de tradiciones indígenas y cristianas.
Además de su importancia espiritual, el santuario ofrece una vista panorámica del pueblo y de los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl. Cada año recibe a miles de peregrinos, especialmente durante celebraciones religiosas. El ascenso al santuario permite apreciar el paisaje natural y la historia del lugar.


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Parque Nacional Izta-Popo Zoquiapan
El Parque Nacional Izta-Popo Zoquiapan es una de las áreas naturales más importantes del centro del país y un gran atractivo para los amantes del ecoturismo. En este parque se pueden realizar actividades como senderismo, campismo y observación de flora y fauna.
Sus bosques de pino y oyamel rodean las faldas de los volcanes Iztaccíhuatl y Popocatépetl, creando paisajes impresionantes. Además de su valor recreativo, el parque es fundamental para la conservación ambiental y el abastecimiento de agua para la región. Es ideal para quienes buscan contacto directo con la naturaleza.


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Paso de Cortés
El Paso de Cortés es un puerto de montaña ubicado entre los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl y uno de los puntos más visitados de la región. Su nombre se debe a que, según la tradición, Hernán Cortés cruzó por este lugar rumbo a Tenochtitlan.
Desde aquí se obtienen vistas espectaculares de ambos volcanes y del valle que rodea a Amecameca. Es un sitio popular para tomar fotografías, iniciar rutas de senderismo y disfrutar del aire de montaña. También funciona como punto de acceso al Parque Nacional Izta-Popo.


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Plaza de la Constitución (Jardín de los Leones)
La Plaza de la Constitución, conocida como el Jardín de los Leones, es el corazón social de Amecameca. Este espacio reúne a habitantes y visitantes para descansar, convivir y disfrutar del ambiente del pueblo.
Destaca por su quiosco central, áreas ajardinadas y esculturas de leones que le dan su nombre. Alrededor de la plaza se encuentran edificios históricos, comercios y restaurantes tradicionales. Durante fines de semana y festividades, la plaza se llena de actividades culturales y eventos comunitarios, lo que la convierte en un punto clave para conocer la vida cotidiana del lugar.

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Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción
La Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción es uno de los edificios más antiguos e importantes de Amecameca. Construida en el siglo XVI por frailes franciscanos, destaca por su arquitectura colonial y su valor histórico.
En su interior se conservan retablos, imágenes religiosas y elementos artísticos de gran importancia. La parroquia ha sido un centro espiritual y social para la comunidad desde la época colonial. Además de su función religiosa, es un atractivo turístico que permite conocer parte del pasado histórico y cultural del pueblo.
¿Dónde comer?
El Castillo de los Venados
El Castillo de los Venados es uno de los restaurantes más conocidos y visitados de Amecameca. Se ubica dentro de la Ex Hacienda Panoaya, lo que lo convierte en una experiencia completa que combina gastronomía y naturaleza.
Es famoso por su buffet de comida mexicana, donde se pueden encontrar platillos tradicionales preparados al estilo casero, además de postres y bebidas. El ambiente es familiar y relajado, rodeado de áreas verdes y con vista a los volcanes. Muchos visitantes lo eligen por la calidad de sus alimentos y por la experiencia de convivir con la naturaleza.



¡Al Chile! Birria
¡Al Chile! Birria es un lugar muy popular entre locales y visitantes que buscan sabores auténticos y bien servidos. Su especialidad es la birria, preparada de manera tradicional y acompañada de consomé caliente, tortillas y salsas.
Es común pedir tacos, quesabirrias y platos completos ideales para una comida rápida pero deliciosa. El ambiente es sencillo y casual, perfecto para comer después de recorrer el centro de Amecameca. Destaca por sus precios accesibles y por el sabor intenso de sus platillos, lo que lo ha convertido en un sitio muy recomendado.



¿Cómo llegar?
Para llegar a Amecameca desde la Ciudad de México, la opción más rápida es en coche por la Autopista México-Cuautla (150D), saliendo en la caseta de Amecameca y siguiendo las señales hacia el centro; el trayecto dura aproximadamente 1 hora y 15 minutos, dependiendo del tráfico.
También se puede ir en transporte público, tomando autobuses desde la Terminal de Pasajeros del sur de la CDMX, como Iztapalapa, con compañías como Estrella Roja o Flecha Roja; el viaje dura alrededor de 1 hora y 30 minutos. Otra alternativa son los tours de un día, que incluyen transporte y visitas guiadas.
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