El chocolate caliente en Puebla tiene una historia milenaria que se remonta a las culturas mesoamericanas como los olmecas, mayas y aztecas, quienes preparaban una bebida ritual a base de cacao, agua y especias, usualmente amarga y espumosa. Esta bebida, conocida como xocolatl en náhuatl, tenía un fuerte valor simbólico y estaba reservada para la nobleza, guerreros y ceremonias religiosas.
Con la llegada de los españoles, el cacao fue adaptado al gusto europeo mediante la adición de azúcar, canela y leche, dando origen al chocolate caliente dulce que hoy conocemos. En México, Oaxaca destaca por mantener vivas las tradiciones del chocolate. Allí se produce chocolate de mesa artesanal, usado para preparar una bebida espumosa con molinillo, un utensilio tradicional. Se cree que fueron monjas oaxaqueñas quienes popularizaron el chocolate endulzado en la época colonial.
Además, en Oaxaca y otros estados del sur como Chiapas y Tabasco, el chocolate sigue siendo parte esencial de la vida cotidiana y de rituales culturales. Bebidas como el tejate (hecho con cacao, maíz y flores) muestran su profunda raíz indígena. El chocolate caliente, más que una bebida, representa identidad, herencia y conexión espiritual en muchas comunidades mexicanas.
Robertina & Enriqueta (R&E)
Ubicada en Avenida Juárez, Puebla, Robertina & Enriqueta es una cafetería que combina café de especialidad y chocolate artesanal en un ambiente moderno y acogedor. El lugar es conocido por su bebida insignia, el Snow Coffee, una deliciosa fusión de chocolate caliente y café, coronada con malvaviscos flameados, trozos de cacao fermentado y otros toppings que varían según temporada. Este concepto une lo reconfortante del chocolate con la energía del café, ideal para los días fríos.
La decoración del espacio es estética y muy instagrameable: muebles de madera clara, plantas naturales, buena iluminación y detalles visuales inspirados en el arte. Ofrecen una barra de espressos, opciones como flat white o dominico, pero también una línea de chocolates calientes elaborados con cacao mexicano. Acompaña tu bebida con su panadería casera, desde roles hasta conchas rellenas de nata.
R&E es también un espacio cultural: suelen participar en festividades como Día de Muertos, creando bebidas temáticas como chocolate con cempasúchil o carbón activado. Es un lugar que mezcla lo tradicional y lo contemporáneo, ideal para quienes valoran el sabor artesanal con un toque creativo. Los precios rondan entre $60 y $100 pesos por bebida, y abren diariamente en horario amplio.
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Chocolate Mayordomo (Puebla)
Con origen en Oaxaca, Chocolate Mayordomo es sinónimo de tradición en México. En su sucursal de Puebla, ubicada en Av. Juárez, esta chocolatería ofrece una experiencia auténtica del chocolate oaxaqueño, tanto para tomar como para llevar. Su bebida más famosa es el chocolate caliente tradicional, preparado con tablillas de cacao molido y espumado a mano con molinillo, ya sea en agua o en leche.
El lugar tiene un ambiente rústico y colorido, decorado con papel picado, mesas de madera y plantas, lo que le da un toque muy mexicano y familiar. Además del chocolate en taza, venden productos como mole negro, tlayudas, mezcal y pan de yema, ideales para llevar a casa un pedacito de Oaxaca. Sus chocolates vienen en varias presentaciones: con o sin azúcar, con almendras o incluso mezclados con canela o vainilla.
Los precios comienzan desde $100 pesos para los productos de cacao, y las bebidas rondan entre $60 y $90 pesos. Es una parada obligatoria si te interesa el chocolate desde una perspectiva cultural y gastronómica. Ya sea para desayunar, merendar o simplemente darte un gusto, Mayordomo es garantía de sabor, calidad y tradición.
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Batte que Batte
Batte que Batte es una cafetería en Puebla enfocada en ofrecer una experiencia saludable y deliciosa, ideal para quienes buscan opciones sin azúcar sin sacrificar el sabor. Durante la temporada de frío, una de sus estrellas es el chocolate caliente con malvaviscos, preparado con una bomba de chocolate sin azúcar que se derrite en la taza. Esta bomba contiene cocoa alcalina y malvaviscos keto, haciendo de esta bebida un placer apto para dietas bajas en carbohidratos o para personas con restricciones alimenticias.
El concepto del lugar es cálido pero moderno, con una carta que incluye repostería libre de azúcar, bebidas artesanales y postres adaptados a un estilo de vida saludable. Es ideal tanto para quienes siguen una alimentación consciente como para los curiosos que quieren probar alternativas dulces sin remordimientos.
Además del chocolate caliente, ofrecen opciones con leches vegetales, cafés especiales y snacks bajos en calorías. Su compromiso con lo natural se refleja también en su decoración: espacios minimalistas, plantas, y una atmósfera tranquila para leer, trabajar o convivir. Los precios de sus bebidas oscilan entre los $60 y $90 pesos. Batte que Batte demuestra que lo saludable también puede ser indulgente y reconfortante.
Café y Tocino
Café y Tocino es uno de esos lugares que se ha ganado el cariño de los poblanos por su enfoque en el comfort food, con un menú reconfortante y variado que incluye desde platillos caseros hasta bebidas cálidas para el alma. Entre estas, su selección de chocolates calientes destaca por su variedad y sabor auténtico. Puedes encontrar desde chocolate blanco, tradicional o con coco, hasta una opción “purista” con cacao del sureste de México, preparado con agua, leche o incluso con leche de coco.
La esencia de Café y Tocino es hogareña, con un estilo que mezcla lo rústico y lo moderno. Es ideal para pasar una mañana lenta, una sobremesa relajada o una merienda en días fríos. Acompaña tu bebida con su repostería o algún platillo caliente del menú.
El cacao que usan proviene de regiones como Chiapas o Tabasco, lo que garantiza un sabor profundo, ligeramente amargo, y muy mexicano. Las bebidas oscilan entre los $50 y $100 pesos, dependiendo de la preparación y el tipo de leche que elijas. Este es un lugar para apapacharse en serio, donde el chocolate no es solo bebida, sino una experiencia.
Barbarista
Barbarista es una barra de café ubicada en Cholula, Puebla, que se ha hecho famosa por su calidad, sencillez y enfoque artesanal. Aunque su carta está dominada por el café de especialidad, su chocolate caliente no se queda atrás. Preparan versiones con cacao amargo o semiamargo, ideal para quienes buscan un sabor más intenso, natural y menos dulce.
Una de sus bebidas estrella es el Mocha, una mezcla equilibrada entre café espresso, chocolate y leche, que combina la energía del café con la calidez del cacao. Es una bebida perfecta para las mañanas frías o para un descanso por la tarde.
El ambiente de Barbarista es relajado, con mesas para compartir, una barra amigable y decoración sencilla pero acogedora. El enfoque del lugar está en la calidad de sus ingredientes y la precisión en cada preparación. Su clientela es diversa: desde estudiantes y freelancers, hasta amantes del café bien hecho y el chocolate artesanal.
Los precios del chocolate caliente rondan entre los $45 y $85 pesos, dependiendo de la mezcla y el tipo de leche. En definitiva, Barbarista es un punto obligado para quienes buscan bebidas cálidas con carácter y sabor real.
Sugar Sugar
Ubicado en la zona de Angelópolis, Sugar Sugar es un espacio que parece sacado de un cuento navideño. Este local es famoso por su repostería creativa, sus espacios instagrameables y, por supuesto, por su chocolate caliente perfecto para la temporada de frío. Entre sus bebidas estrella está el Rodolfo Latte, un batido con especias y un toque de arándano, ideal para quienes quieren algo diferente y festivo.
También puedes disfrutar de su chocolate caliente clásico, acompañado con alguna de sus creaciones de temporada como las roscas individuales de chocolate Turín, Nutella o galleta Lotus, o sus pasteles en forma de pino navideño o del Grinch. Estos postres no solo son deliciosos, sino que también son un espectáculo visual.
El lugar cuenta con una terraza con mesas al aire libre, un salón cómodo y un nuevo espacio en el segundo piso. Todo está decorado al detalle, por lo que también es perfecto para fotos. Los precios de sus bebidas rondan los $70 pesos, mientras que los postres especiales pueden ir de los $100 a $150 pesos. Sugar Sugar no es solo una cafetería, sino una experiencia para todos los sentidos.
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