Colima, aunque pequeño en extensión, destaca por la abundancia de sus riquezas naturales y es conocido por ser la cuna de uno de los productos más preciados en la cocina mexicana: el limón. Este cítrico, fundamental en una amplia variedad de platillos y bebidas, ha encontrado en las fértiles tierras de Colima el ambiente perfecto para crecer, sobresaliendo por su sabor, frescura y jugosidad.

Para los habitantes de México, el limón es un ingrediente esencial y sumamente versátil dentro de la gastronomía. Su presencia es casi obligatoria en la preparación de caldos, ensaladas, carnes y mariscos, donde su toque único resalta los sabores. También es protagonista en bebidas, como las aguas frescas y los tés, además de utilizarse en aceites esenciales gracias a su fresco aroma. Sin embargo, no todos los limones son iguales, y los de Colima se distinguen por su sobresaliente calidad, siendo apreciados como unos de los mejores del país.

Los primeros cultivos comerciales de limón en Colima se remontan a los años 1920, en haciendas como Nogueras, Buenavista y El Banco, ubicadas en los municipios de Comala, Cuauhtémoc y Coquimatlán. Con el paso del tiempo, la producción se extendió a otras zonas, como Tecomán y Armería, donde las tierras volcánicas han favorecido el desarrollo de este fruto. Actualmente, Colima ocupa el segundo lugar en la producción de limón en México, convirtiéndose en un motor clave para la economía agrícola de la región.

Los limoneros de Colima, árboles robustos de frondoso follaje, producen este fruto a lo largo del año. El limón colimense, con un peso que oscila entre los 30 y 35 gramos, destaca por su cáscara delgada y una pulpa de color verde claro, que contiene entre un 45% y 48% de jugo, lo que lo hace especialmente jugoso y aromático en comparación con otras variedades.

Te recomendamos:

6 atractivos de Colima para vivir unas vacaciones llenas de adrenalina

Si eres de emociones fuertes, échale un ojo a los mejores atractivos de Colima, como surf, cañonismo, parapente, entre otros

La excelente calidad del limón de Colima ha permitido que su fama cruce fronteras, exportándose principalmente a mercados internacionales como Estados Unidos, Japón y China. En la gastronomía, su impacto es notable, formando parte de la elaboración de numerosos platillos y postres, desde pays hasta helados, pasando por carnes marinadas y mariscos. Disfrutar estos manjares acompañados de una refrescante agua de limón o una michelada preparada con limones colimenses es una de las mejores maneras de degustar este “oro verde” que la tierra de Colima regala al mundo.

Visitar Colima es no solo un deleite visual por sus imponentes paisajes volcánicos y costas, sino también una oportunidad única para saborear la frescura de uno de sus productos más representativos: el limón.