Algunos mexicanos están redoblando su inversión hotelera en España. Un claro ejemplo de esto es el H10 Punta Negra, en Mallorca, que se está vendiendo a un mexicano por un valor que se considera récord en la zona.
Entre las compañías mexicanas que han invertido en este negocio en España se encuentra RLH, empresa que cotiza en la bolsa y cuya vocación es la adquisición, desarrollo y administración de hoteles y resorts de lujo.
Esta empresa está bajo el mando del mexicano Fernando Chico Pardo, quien es uno de los mayores accionistas de Asur y uno de los propietarios del Hotel Villa Magna, en Madrid.
Por otro lado, se encuentra Ernesto Coppel Kelly, uno de los hoteleros más importantes de México, quien tiene propiedades en diferentes destinos del país.
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España, segunda fuente de inversión extranjera
Los ataques del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, hacia empresas, autoridades y figuras españolas, han creado incertidumbre para los hoteleros y empresarios mexicanos.
El mandatario mexicano ha convertido a las empresas españolas en el blanco de críticas y acusaciones durante sus conferencias de prensa diarias. Las señala de haber firmado contratos abusivos con administraciones pasadas y bajo conflictos de interés. Sus declaraciones han puesto en riesgo unos 70,000 millones de dólares de inversión y miles de empleos.
El pasado 4 de febrero, la Cámara Española de Comercio (Camescom) publicó una serie de datos que sugieren que los inversores españoles han resistido, por el momento, de una manera hostil a las peticiones de López Obrador.
España es el segundo inversor más grande de México, después de Estados Unidos. En los primeros nueve meses de 2021, empresas españolas habían invertido 76,000 millones de dólares, lo que representa el 12% de los flujos al país.