México es uno de los países más ricos en yacimientos de plata y, de hecho, en los últimos años ha encabezado el top ten de productores del preciado metal en el mundo.
Durante la Colonia, de norte a sur, la minería contribuyó a forjar el rostro de México, ya que esta actividad dio origen a diversas poblaciones que conocemos actualmente.
La explotación de este metal en México inició en el siglo XVI y continúa hasta nuestros días, desde Fresnillo, en Zacatecas, hasta Taxco —cuya orfebrería es muy reconocida—, en Guerrero.
Hidalgo, un estado rico en plata
En tiempos coloniales, el actual estado de Hidalgo fue una de las principales regiones productoras de plata. De ese periodo de esplendor quedan haciendas de beneficio, minas y diversos monumentos.
Fue tan importante la actividad minera en Hidalgo que dio origen a diversas poblaciones como Real del Monte o Huasca de Ocampo, así como la misma capital, Pachuca, y otras, en medio de bellos paisajes como el Parque Nacional del Chico o el Bosque del Hiloche.
Varios de los sitios hidalguenses en los que la minería tuvo una gran relevancia constituyen actualmente la Ruta de la Plata, un circuito turístico para conocer mejor al estado de Hidalgo y su pasado.
La Ruta de la Plata en Hidalgo
En la Ruta de la Plata está incluida la capital, Pachuca, así como Mineral del Monte (antes Real del Monte), Mineral de la Reforma, Huasca de Ocampo, Mineral del Chico, Omitlán y la Sierra de las Navajas.
En lo que respecta a Pachuca, destacan como atractivos turísticos su Reloj Monumental, el monumento a Cristo Rey, el Parque David Ben Gurión y el Centro Interactivo Mundo Fútbol y Salón de la Fama del Fútbol Internacional, entre otros.
En Mineral del Monte, entre los principales lugares a visitar se encuentran el Santuario del Señor de Zelontla, el Templo de la Santa Veracruz, la Mina la Dificultad y el Museo del Paste. Se dice que en esta población se disputó el primer partido de fútbol en México.
El Corredor Gastronómico de Hidalgo
En Mineral de la Reforma puedes visitar la Parroquia de la Preciosa Sangre de Cristo, el Rancho Agua Bendita —dedicado a la conservación del hábitar natural y de diversas especies animales— y el Mirador Natural del Velillo. Es reconocido como el Corredor Gastronómico de Hidalgo por las opciones de excelente calidad para comer con las que cuenta. Está extremadamente cerca de Pachuca, en algunos puntos, sólo una calle separa a ambos municipios.
Huasca de Ocampo, según la leyenda, fue una población creada gracias a Don Pedro Romero de Terreros, uno de los hombres más acaudalados del mundo en su época, dueño de tres haciendas en ese hoy Pueblo Mágico, de las que subsisten San Miguel Regla y Santa María Regla. Aquí también puedes visitar los famosos Prismas Basálticos, el Museo de los Duendes y la Peña del Aire.
Quizá te interese:
Bosque de las Truchas, lo mejor del turismo en Hidalgo
Un lugar poco conocido en el Pueblo Mágico de Huasca de Ocampo, pero con un encanto indiscutible
Un Parque Nacional en la Ruta de la Plata
Mineral del Chico, a pesar de ser un Pueblo Mágico muy pequeño, cuenta con varios atractivos empezando por sus minas, de las que puedes recorrer sus túneles; también está la montaña Las Monjas, parte del Geoparque Comarca Minera. En el Parque Nacional El Chico puedes visitar y hospedarte en el Parque Recreativo El Cedral, y conocer la impresionante Peña del Cuervo y su mirador. Si te gustan las actividades extremas, recorre la Vía Ferrata de Mineral del Chico en la montaña La Tanda.
En Omitlán, visita la Peña del Zumate y en Epazoyucan conoce la Sierra de las Navajas y el Templo de la Purísima Concepción, con impresionantes murales como “La última Cena”, “La Asunción de la Virgen María” y el “EcceHomo”.
¡Recorre la Ruta de la Plata y conoce más de la historia de Hidalgo y México!