Generalmente, asociamos al bambú con China e incluso con Japón. Quizá por las miles y miles de imágenes de osos panda que hemos visto en fotografías y documentales comiendo esa planta que pensamos que es originaria del Lejano Oriente.
Sin embargo y, por increíble que parezca, el bambú se utiliza en México desde la época prehispánica para construir viviendas y elaborar artesanías. Y en Argentina, Ecuador y Colombia, se tiene registro de su existencias desde el Plioceno. Es decir, por lo menos desde hace ¡2.5 millones de años!
De hecho, según diversos estudios, en todo el planeta hay, al menos, 90 géneros y más de mil especies. Están distribuidas, principalmente, en África, América y Asia. En nuestro país, de acuerdo con la Comisión Nacional Forestal (Conafor), tenemos 36 especies leñosas y cuatro bambúes herbáceos.
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El bambú en México
Seguramente te sorprenderá saber que el bambú pertenece a la familia de las gramíneas, la misma que aglutina a los cereales, la caña de azúcar, los forrajes y otros pastos, por ello, no es de sorprender que parte de ella sirva como alimento.
Es una planta muy versátil, pues además de comida, del bambú se obtiene ropa, celulosa para papel y medicamentos, y puede utilizarse como material de construcción. De hecho, en todo el mundo se ha registrado más de mil usos diferentes del bambú en procesos industriales.
En México, se ha identificado 8 géneros y, como dijimos anteriormente, 36 especies de bambúes leñosos y cuatro herbáceas. Los herbáceos no tienen tallos ni ramas y son como pequeños pastos. En tanto, los leñosos siempre están verdes, son resistentes al frío y a las heladas, y pueden crecer hasta 25 metros.
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Tipos de bambú en nuestro país
De los bambúes que hay en nuestro país, los más grandes y frondosos son los del género Guadua —conocidos como cañizo o caña brava—. Presenta cinco especies nativas: G. aculeata, G. amplexifolia, G. longifolia, G. paniculata y G. velutina.
De esas, la Guadua aculeata, conocida comúmnente como tarro, por su resistencia y tamaño —hasta 25 metros de altura— se utiliza en la construcción de viviendas en la región Huasteca, principalmente en los estados de Puebla —sobre todo en la Sierra Nororiental— y Veracruz.
También tenemos al otate, usado desde tiempos prehispánicos para construir casas. Es el que abarca más estados del país, teniendo presencia en Chiapas, Colima, Hidalgo, Jalisco, Morelos, Nayarit, Oaxaca, San Luis Potosí, Sinaloa, Tabasco, Tamaulipas y Veracruz. También se usa para construir cercas, puertas, ventanas y muebles, y sirve como leña.
México cuenta, además, con los bambúes chusquea, el más diverso del mundo con 200 especies, 17 de ellas en nuestro país en Chiapas, Jalisco, Nuevo León, Oaxaca y Veracruz. El olmeca, de frutos carnosos y hábitat en las selvas húmedas de Chiapas y Veracruz. Y el género Merostachys, de población muy reducida y crecimiento en Chiapas.
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Utilidad del bambú en México
En nuestro país, por su resistencia y duración, el bambú es utilizado para construir viviendas y cobertizos. Así como para la elaboración de muebles, cestería, utensilios y diversas artesanías, principalmente en las zonas rurales.
Además, se usa también para hacer cimbras de construcción, para poner cercas vivas en las propiedades, para hacer escaleras e hilos, e incluso como medicamento. Desafortunadamente, su uso se ha visto restringido a las zonas o regiones donde crece. Pero se considera que podría detonar la economía mexicana.
En el mundo, China e India son los principales países productores de bambú. En México, es Puebla el estado que tiene el primer lugar en producción, con 2,554 héctareas. Veracruz y Tabasco ocupan los lugares dos y tres, con 1,304 y 93, respectivamente, según números de la Conafor.
México podría convertirse a mediano plazo en el productor número uno de esta planta en Latinoamérica. Eso es lo que opinan diversos especialistas, por la cantidad de áreas cultivadas de bambú con las que cuenta. Esta proyección, por supuesto, ha llamado poderosamente la atención de varias empresas. Sin embargo, hasta el momento son pocas las que han invertido en el sector en nuestro país.
