El Castillo de la Esfera nació hace más de 25 años en el Pueblo Mágico de Chignahuapan en el estado de Puebla. Actualmente es la fábrica de esferas más grande de México y sus creaciones adornan gran parte de los árboles de Navidad del país cada diciembre.
Desde hace tiempo este lugar abrió sus puertas a todo visitante sin costo alguno para mostrar el proceso de fabricación de sus esferas. Esto sucede mediante un interesante recorrido por sus diferentes áreas en las que la magia navideña está presente en cualquier época del año.
Foto: creaciones del castillo de la esfera en su etapa final de fabricación
Foto: Esferas navideñas elaboradas en el castillo de la esfera
Premios y reconocimientos
El Castillo de la Esfera comenzó a operar como un pequeño taller que creció poco a poco hasta convertirse en una gran empresa orgullosamente mexicana que, gracias a su dedicación y la calidad de sus productos, ha cosechado diversos reconocimientos en el camino.
Algunos de los premios más importantes que ha ganado son el Galardón Internacional Excelsis Global Quality Foundation, en 2012; Mejor Empresa del Año LAQI (Latin American Quality Institute), en 2017, y el Reconocimiento de Alta Calidad e Innovación, en 2018.
Los “secretos” del Castillo
El recorrido que revela la forma en que se fabrican las esferas del Castillo inicia en la zona de globeo, donde los artesanos calientan el vidrio con ayuda de un soplete hasta que pueden desprender una parte al rojo vivo que moldean con la técnica de vidrio soplado.
Algo de lo más admirable en este lugar es que todo el proceso es 100 por ciento artesanal, hecho a mano por mujeres y hombres de gran experiencia, a excepción de la etapa de metalizado, realizada con una máquina especial que confiere a las esferas un tono platinado que ayuda a intensificar el color al momento en que son pintadas.
Después de la pintura, se decora las esferas con diferentes diseños de acuerdo a su forma y el proyecto para el que estén destinadas. Finalmente, son empacadas, también de manera manual, y se procede a su distribución en el estado de Puebla, todo México y otros países.
Foto: Duendes, frutas, juguetes y hasta súper héroes, entre otras figuras, son inspiración para crear las esferas
Foto: El castillo de la esfera da empleo a muchos jóvenes de la región
Foto: En la zona de globeo se lleva a cabo la primera fase de elaboración de las esferas
Foto: Todo el proceso, a excepción del metalizado, es completamente artesanal
Foto: Cada etapa es importante para conseguir un producto de la mejor calidad
De todas formas, tamaños y colores
En este Castillo encontrarás esferas de todos los tamaños, formas y colores, además de adornos no sólo para la Navidad sino también para cualquier temporada del año. Verás, por ejemplo, centros de mesa para tus eventos especiales, candelabros, figuras para decorar tu hogar, accesorios personales y más.
La fábrica se distingue, además de la calidad de sus productos, por lanzar cada año esferas con una temática particular, la cual depende de las propuestas de sus diseñadores.
Entre los más exitosos se encuentra el diseño tipo talavera y no dudamos que el de este 2020, dedicado a los juguetes tradicionales, como el yoyo y el trompo, tenga una buena acogida entre la gente.
El recorrido termina en un gran almacén en el que podrás comprar todos los productos que aquí se fabrican. Tendrás la oportunidad de elegir tus esferas entre diferentes diseños y tipos de decoración con diversos personajes y figuras especiales como unicornios y hadas, entre otros. Entre tanta variedad, ¡tu elección será real- mente difícil!
Visitar el Castillo de la Esfera es apoyar a los artesanos y la mano de obra de cientos de familias poblanas que con su esfuerzo, dedicación y amor logran productos de alta calidad que llenan de color las calles y los hogares de México y de otras partes del mundo.