Se trata de algas que crecen en masa, lo que provoca que, a pesar de ser microscópicas
La nieve de color verde que está floreciendo en la Península de la Antártida puede extenderse debido al cambio de temperatura en el planeta.
Datos satelitales recopilados entre 2017 y 2019, durante dos veranos, permitieron a los científicos mapear las algas microscópicas a medida que florecían.
Estas algas crecen en masa, lo que provoca que, a pesar de ser microscópicas, hacen que espacios de nieve se vuelvan verdes y es posible verlo desde el espacio, a este efecto se le conoce como “nieve verde”.
Un equipo científico de la Universidad de Cambridge y del British Antarctica Survey han publicado este viernes sus conclusiones sobre el estudio del alga, después de haber estado haciendo observaciones durante dos veranos en la Antártida, en Nature Communications. Estas conclusiones suponen un avance en la comprensión de la flora de la Antártida.